3º¿Vuelta a casa?

Ya era el día para ir a la Ciudad. Todos los alumnos, alumnas y maestros estaban haciendo la maleta y mirando a ver sí faltaba algo en la excursión.


Todos subieron al autobús que fue a recogerlos. Pararon en un pueblo pequeño, pero con mucha gente como si de una ciudad se tratase.


El autobús circulaba muy lento para no atropellar a nadie porque muchos cruzaban sin mirar.


Al llegar al destino lo primero que hicieron fue bajar todas las maletas y todos se dirigieron a coger el avión.

El avión aterrizó antes de tiempo así que allí había aun pocos padres esperando.


Los padres de Lucas y Miguel no habían llegado todavía. Lucas esperaba a sus padres en el suelo sentado y en frente de él estaba Miguel, sentado en su maleta y jugando con una bolsa pequeña. Se apreciaba que dentro de la bolsa había algo pequeño con forma de bolita.


Miguel metió la mano en el bolsillo, cogió su iPhone y empezó a mirar algo. De repente comenzó a llorar. Lucas no sabia que lo que estaba mirando eran fotos de los dos juntos. Entonces Miguel paró de llorar y se secó sus lagrimas y empezó a jugar con el iPhone.


-¡Lucas,Lucas!-gritaba su madre con la mano levantada-¡ Aquí estamos!


Lucas se levantó y vio a su familia, pero faltaba su hermano mayor, su único hermano. Cuando se acercó a ellos recibió con un abrazo a todos. Pero cuando se soltó, Lucas no pudo evitar mirar atrás y vio a Miguel allí solo, sentado en su maleta. En ese momento todavía Lucas dudada si estaba enamorado de él o no.


Lucas empezó a caminar con su familia a donde estaba en coche.


Cuando llegaron se montaron y la madre de Lucas puso la radio.


Todo el camino estaban callados. Lucas sospechaba que pasaba algo raro, pero no sabía que era. Los padres se miraban entre ellos como si tuvieran que decirle algo a Lucas y ninguno de los dos quisiera empezar.


Lucas pensó en varias cosas en el camino a casa: Los padres se divorciaban, se han peleado entre ellos o algo peor, que Lucas no quería ni imaginar, que su hermano ... había muerto.


Lucas no pudo evitar pegar un grito cuando imaginó que a su hermano le había pasado algo y los padres le miraron hacia atrás en el coche. La madre comenzó a hablar con una cara asuntada y la voz algo temblorosa del susto:


-¿Qué te pasa hijo?


-¿Mi hermano donde esta?-Decía Lucas nervioso-¡Qué le ha pasado!


-Nada hijo-contestó su madre para tranquilizarle-¿Por qué dices eso? Tu hermano esta en casa, solo que no ha querido venir


Lucas cogió aire y dijo:


-¿Y qué pasa entonces?


-Hijo, iba a contártelo en casa- le dijo poniendo la madre la mano en el hombro de Lucas.-Cuando lleguemos a casa tienes que recoger tus cosas y guardarlas en unas cajas que están en tu habitación. Esta mañana fuimos a tu instituto para darte de baja de allí


Lucas, se estaba poniendo triste y la madre le retiró la mano y prosiguió -Le he pedido a tu director que te deje esta semana ir a clase para despedirte de tus amigos y el sábado nos vamos al pueblo.


A Lucas le dolió bastante escuchar``despedirte de tus amigos´´. El no tenia amigos, el único amigo que le importaba era Miguel y estaba enfadado con él, así que no se tenia que despedir de nadie.

Cuando llegaron a casa, había muchas cajas en medio del pasillo. La madre de Lucas le comentó en el camino que al día siguiente llegaba el camión de la mudanza y el padre ya comenzaba a vivir en la casa nueva el siguiente lunes.


Lucas subió por la escalera para ir a su habitación.


Antes de llegar a su habitación, tenia que pasar por la habitación de su hermano. La habitación de su hermano estaba en silencio, no se había movido ningún objeto en ella y no tenia cajas por medio. El hermano de Lucas no estaba allí, había salido con sus amigos a la calle. Lucas empezó a sospechar que su hermano no iba ir con ellos y se iba a quedar en aquella casa, porque ya era mayor de edad y tenia un trabajo en la ciudad.


Lucas entró en su habitación. Lo primero que hizo fue coger una foto que estaba encima de la mesa: la foto de él con Miguel. Lucas empezó a llorar porque había perdido a Miguel como amigo.


Después agarró su ordenador portátil y se tendió en su cama con la foto al lado. Lo encendió y pincho la carpeta de música. Buscaba alguna canción chula. La música que puso fue la misma que había escuchado con Miguel otras veces y que a los dos le gustaba mucho: ``Jena lee-je me perds´´.





Entonces se levantó de la cama y se dirigió al cajón para coger una carpeta que iba a enseñarle a Miguel y que sabia que iba a solucionarlo todo.